Una lectura inocente salpicada de lecciones de vida, mucho folclore, fábulas clásicas y no tan clásicas. Josep da una vuelta por muchos cuentos y leyendas archiconocidos y olvidados.
Creo que es un libro perfecto para leer por capítulos a niños y pasar un muy buen rato con ellos.
FICHA
Título: Los libros de A
Autor: Josep Lluís Badal
Editorial: LaGalera
Páginas: 576
Género: Fantasía
SINOPSIS:
Un niño y una niña, un abuelo que vive en una buhardilla rodeado de libros y objetos. Un error en el bosque, el peso del remordimiento. Y una llave que el abuelo da a sus nietos: la llave al mundo del Abuelo Roble. Una novela infinita con docenas y docenas de personajes inolvidables, desde el Niño Yogur y la Niña Vainilla hasta el samurai cellista Miyamoto-Yoyo, la señorita Dickinson (Emily), Ahab el cazador de dragones. Una historia verdaderamente épica, con raíces en Gilgamesh y las grandes mitologías.
El volumen se compone de tres libros, separados por una serie de circunstancias que dan final a un relato y comienzo a otro. Pero no tratan diferentes temas, ni se rompe mucho el hilo temporal. Se sigue con los mismos personajes principales y el mismo ritmo.
Los personajes son Tavo y Maya, dos hermanos que viven con sus padres y su abuelo Drus: un contador de cuentos nato. Drus siempre está en el desván de la casa, escribiendo y leyendo, rodeado de libros, polvo y un montón de objetos maravillosos.
A los niños esto les fascina y siempre suben a pedirle que relate historias, hasta que un buen día, descubren que el pozo de su patio es una puerta para entrar a un mundo mágico y fantástico donde todos los habitantes conocen al abuelo.
La narración gira entorno a los dos hermanos y al Abuelo Roble, un árbol milenario que esconde multitud de secretos en su interior. Se encontrarán muchos personajes de la cultura popular, de mitologías, cuentos y leyendas...
Esto es una característica muy curiosa del libro, pero que a su vez me ha sobrepasado un poco. La cantidad de personajes es tan abrumadora y las presentaciones tan repentinas que te pierdes entre historias y acabas no sabiendo quién es quién. Además te aleja mucho y muchas veces de la trama principal, creando confusión y hastío.
Por eso creo que la manera de leer Los libros de A influye mucho en el disfrute de éste. No hay que leerlo como una novela, seguido y como si hubiese una entramada historia. Es un compendio de cuentos, que puedes leer poquito a poquito. Día a día, disfrutar de las historias que te cuentan, ya que hacen sombra al verdadero argumento.
Para mí le falta una vuelta, limar este tema, ya que si está dirigido a niños la lectura se convierte densa y, nuevamente, confusa. Característica que no facilita que llegue a los peques.
Pero es muy curioso encontrarte con todas estas personalidades, de las historias más antiguas, interactuar con Tavo y Maya.
Otra cuestión que hay que destacar son las maravillosas ilustraciones de Zuzanna Celej. He de decir que este libro lo compré en su momento debido a éstas. Las ilustraciones son mágicas y encantadoras. Le aportan un valor incalculable, y un toque único. Las ilustraciones de Zuzanna hacen de Los Libros de A una novela mucho más valiosa.
Comentarios
Publicar un comentario